¡Viva el priapismo matinal, carajo! Por mucho que digan los neurólogos que ahí tenemos un posible síntoma del parkinson... Ellos, con tal de empezar a jodernos el nuevo día... Como si el despertar, de por sí, y como dijo el buen Kafka, no fuera el momento más arriesgado del día. No sé si haiku, pero una vez más has clavado el poema. Y las fotos son una verdadera obra de arte, sin más. Felicitaciones para ambos. JL
No sabía lo del síntoma del parkinson. Aunque, ahora que lo pienso, sí que puede tener su relación, porque más de una que me ha vislumbrado de tal guisa se ha echado a temblar...JaJaJaJa
Querido Germán, he de decirte que yo en todas mis anteriores vidas he sido plañidera, de hecho soy una de las mejores (reconocidas), por lo tanto sólo puedo decirte...¡que buen ojo tienes! y como muestra, te envio algo que escribí cuando tenia unos 9 ó 10 años, dentro va toda una historia, pero eso....es otra historia. Chata, meona y llorona. Es la copla que me cantas y yo, para acompañarla te devuelvo el chupete, para cuando puedas, hagas gárgaras. ....Nunca una venganza fué tan dulce... Con tu permiso, te cojo prestada la foto de "las compañeras plañideras". Un abrazo. Teresa
¡Viva el priapismo matinal, carajo! Por mucho que digan los neurólogos que ahí tenemos un posible síntoma del parkinson... Ellos, con tal de empezar a jodernos el nuevo día... Como si el despertar, de por sí, y como dijo el buen Kafka, no fuera el momento más arriesgado del día.
ResponderEliminarNo sé si haiku, pero una vez más has clavado el poema.
Y las fotos son una verdadera obra de arte, sin más.
Felicitaciones para ambos.
JL
No sabía lo del síntoma del parkinson. Aunque, ahora que lo pienso, sí que puede tener su relación, porque más de una que me ha vislumbrado de tal guisa se ha echado a temblar...JaJaJaJa
ResponderEliminarQuerido Germán, he de decirte que yo en todas mis anteriores vidas he sido plañidera, de hecho soy una de las mejores (reconocidas), por lo tanto sólo puedo decirte...¡que buen ojo tienes! y como muestra, te envio algo que escribí cuando tenia unos 9 ó 10 años, dentro va toda una historia, pero eso....es otra historia.
ResponderEliminarChata, meona y llorona.
Es la copla que me cantas
y yo, para acompañarla
te devuelvo el chupete,
para cuando puedas,
hagas gárgaras.
....Nunca una venganza fué tan dulce...
Con tu permiso, te cojo prestada la foto de "las compañeras plañideras".
Un abrazo. Teresa